Sin lugar a dudas, podemos afirmar que la Virgen de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá es un ícono de religiosidad para la iglesia católica, especialmente en el Zulia. No obstante, la manera como se han contado su aparición en aquellas aguas cristalinas del Lago de Maracaibo y su iluminación en la tablita que servía de tapa a la tinaja de una mujer, que lo único que conocemos de ella es que era una sirvienta anónima. En el transcurrir del tiempo, esos acontecimientos la han convertido en una especie de leyenda llena de fervor, que, al tomar el nombre propio de La Chinita, le dio también una identidad a la región zuliana que va más allá de lo religioso.